Desde los cavernícolas paleolíticos, hasta los 140 caracteres
de twitter; pasando por los relevos que se echaban los enviados de Moctezuma a
Veracruz para llegar con el pescado “fresco”, el telégrafo de Morse y el
teléfono de Bell en 1876; los seres humanos no hemos podido, ni podremos resistir
la cosquillita de externar prácticamente lo que sea: nuestra realidad, ideas, sentimientos,
conocimiento, o lo buena que estuvo la borrachera del día anterior.
Llenas de significados y símbolos, nuestras actividades
manifiestan la necesidad de transmitir información, cada vez más rápida y
confiable. Aquí entra el papel de la tecnología, como un conocimiento técnico y
científico aplicado a distintos medios, que satisfacen aquellas necesidades del entorno. Es
importante mencionar que la tecnología no es únicamente lo electrónico y digital,
los lentes de botella con los que estás leyendo este blog, el destapador con el
que acabas de abrir la última chela, la ropa que estás usando, tu coche, la
música y hasta el chocolate, son parte del desarrollo humano y tecnológico,
podrán ser ejemplos burdos, pero son resultado del constante ensayo y error que
durante años nos ha fascinado y nos orilla al maravilloso mundo tecnológico en el
que vivimos.
Hasta hace unos 3 años, nos autonombrábamos “La sociedad de
la información”. Partiendo de los datos transmisibles, almacenables,
coleccionables y reproducibles, que llegan al destinatario por medio de un
mensaje; informarse es autoconstruirse, lograr adueñarse del conocimiento y
mejorar. ¡Todo informa!
Teníamos la -ahora vaga- esperanza de que con las nuevas
tecnologías el conocimiento se democratizaría, que la hoy llamada, “sociedad
del conocimiento” sería capaz de aprovechar las ventajas de la tecnología para
construir la información que recibimos, de todos lados, analizarla y aplicarla.
No debemos generalizar, pero parece que la mayoría vivimos un en un mundo de
idiotas. No se sientan aludidos, solo recordamos el miedo que Einstein tenía
sobre esto, cuando mencionaba que a veces con la tecnología nos olvidamos de
que somos seres humanos, ¿les suena familiar?
Conectada fuertemente con las definiciones anteriores, la comunicación es: poner algo en común, lograr un proceso en el que se construya y
reconstruya la información, para lograr que el mensaje se retroalimente, modifique
al otro y permanezca. Shannon y Weaver decían que comunicación es “Un conjunto
de procedimientos por medio de los cuales una mente afecta directamente a otra”.
Hoy tenemos ipods, ipads, iphones, i- tal cosa, i- la otra, softwares,
apps, audífonos, dispositivos chiquitos, chiquititos,miniatura, y una larga
lista de etcéteras electrónicos que almacenan, procesan y transmiten
información, por medio de sistemas tecnológicos y modernos que se integran a un
sistema interconectado y complementario; Eso es: “Tecnologías de la información
y comunicación”
Es irónico pensar que el avance nos está estancando. Con el
mal uso de las nuevas TIC´s, TI, IT, o como quieran llamarlas, parecemos robots
receptores, programados para todo, menos para pensar lo que estamos recibiendo
y mandando. Y es un acto de comunicación pura, que pone sobre la mesa la
necesidad de actuar al respecto. Más que una crítica, tomemos esta postura como
un cuestionamiento de nuestra actitud ante esta nueva “revolución tecnológica”.
¡LO QUE SE ENCUENTRA EN INTERNET! Una manera más divertida de
ver las cosas:
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